Piscina y centro deportivo en Fuensalida
Fecha y Lugar: 2017, Fuensalida, Toledo.
Cliente: Ayuntamiento de Fuensalida
Autores: MADE.V arquitectos – Eduardo A. Carazo Lefort, Manuel Cuadrado Señorans, Álvaro Moral García, Daniel González García
Colaboradores: Pablo Cendón Segovia
Premio: Primer Premio en Concurso Nacional de Ideas.
La propuesta arquitectónica pretende dar respuesta a unos criterios sencillos de sensatez, simplicidad, economía, sostenibilidad y sensibilidad.
El proyecto tiene dos puntos fuertes. El primero es el. espacio interior, generado por una topografía que adapta las alturas a los diferentes usos y contenido por unos muros que se pliegan y desarrollan creando unos espacios intersticiales, abrazando los diferentes espacios y disolviendo la línea existente entre edificio y jardín. Los muros se pliegan diferenciando la bipolaridad de los espacios principales. El primero, el recinto de la piscina, ligeramente rehundido en el terreno para conseguir la altura normativa de 4.00 m. El segundo recinto, a cota de calle, desarrollare las actividades polideportivas. El segundo punto fuerte del proyecto es la cubierta que dota de unidad al conjunto. Este elemento, de gran espesor, va a estar formado por una retícula de vigas aligeradas, que va a permitir una gran flexibilidad especial y estructural, apoyándose en los muros y en líneas de pilares variables y cambiantes. El resto de los espacios con necesidades más privadas tendrán la dimensión domestica de muebles. Se realizaren con gran independencia de los muros portantes, generando recorridos circulares y pasantes.
Es un proyecto que acota su exterior para ser vivido fundamentalmente desde su interior, desde la riqueza y variedad de sus patios y recorridos. Son estos patios los que dotaren de luz, vegetación y, en definitiva, de vida al conjunto del proyecto y a sus usuarios, tanto niños como mayores. Este recinto será amable con la ciudad y su entorno más próximo. La dotare de varios espacios urbanos de esponjamiento y relación, a la vez que generare un nuevo mundo interior donde los deportistas serán los dueños y se encontraren protegidos del. entorno urbano más próximo, que, determinado por el uso, ha de ser poco permeable.
El programa se reparte según el recorrido habitual de los usuarios, un pequeño pliegue, con la cubierta volada nos marca la entrada principal después de haber accedido a la parcela. En la zona de acceso encontramos un hall de entrada, que distribuye dos circulaciones, la zona polideportiva y el acceso a los vestuarios y la piscina. Por otro lado, se sitúan todas las instalaciones en sótano, con un acceso para vehículos. Se aprovecha la necesidad de excavación de la piscina para empaquetar a la misma cota estas instalaciones, permitiendo también, si fuera necesario un área perimetral de mantenimiento para la piscina.